Mi Dolor tras el silencio

Nunca me he arrepentido de las decisiones que he tomado, creo dentro de mi que siempre son las mejores, quizás siendo demasiado altivo o arrogante, o peor aún temiendo reconocer el haberme equivocado, una de estas decisiones la cuál no me perdonare jamás, es el haber callado, haberme quedado sin decirle a esa persona que hacia cada momento de mi vida “especial”, que era todo lo que había estado buscando, que cuando compartía cualquier momento, por más absurdo que este fuera simplemente no había línea de tiempo, nada había ocurrido ni ocurriría, para ser más especifico siendo un gran fanático de béisbol esta persona con solo una palabra me podía hacer olvidar cualquier derrota del Caracas ante el Magallanes, y vaya que decir esto para los que conocen el caso es decir bastante sobre la magia que tenia ella hacia mi.

No muchas personas tienen el don de descubrir mi verdadera personalidad, solo los seres más cercanos y como es de esperarse esta mujer siempre lo tuvo, si me evaluaran psicológicamente y créanme que ya lo he escuchado, dirían que mis inseguridades se esconden tras el conocimiento y las palabras que utilizo (incluso antes de escribir este mensaje pensaba que me podía ver ridículo si erraba en algo) debo admitir que tras las sombras del anonimato es más fácil desahogarse, más aun cuando nos adentramos en cualquier rol que busquemos representar (muchas veces el verdadero yo). Si Freud hubiese conocido la internet, seguramente diría que es el medio que logra desinhibir al ser de todas las pautas impuestas por la sociedad, por medio del cual deja ver su verdadera personalidad, porque pensándolo bien que arriesgamos, quizás malos comentarios como por ejemplo un “no me gusto Neruda”, algún error ortográfico, que no logremos transmitir bien el mensaje incluso no ser leído, pero si fallamos no tendremos ningún tipo de resabio, a fin de cuentas nadie llegara a saber quien esta detrás del teclado, a menos que nosotros mismos lo propiciemos.

Esto sin duda me hace pensar que la vida cibernética es más fácil que el mundo real, lastima que la internet no pueda resolver todos nuestros problemas, es aquí cuando mi relato comienza a tomar forma, pues si bien logre obtener la atención de esta mujer nunca pude mostrar plenamente mi verdadero yo, siempre me he preguntado que sienten las personas que realmente aman o que lo han hecho en su momento, que se sienten al entregarse a una persona, al aceptarse el uno al otro, jamás he podido intentar conquistar a una mujer, aún sabiendo que se lleva bien conmigo, que la puedo hacer reír, que la puedo escuchar, verla llorar y que puedo lograr que me cuente todos sus problemas, no dejo de pensar que no paso de ser un amigo más y que por un error de calculo, podría dejar de tenerla y distanciarla.

Si conociéramos nuestro futuro todo seria sumamente sencillo, de hacerlo obviamente habría hablado le habría dicho todo lo que siento, seguramente me hubiese llevado un gran golpe contra una pared y me hubiese sentido sumamente desgarrado, quizás ya lo habría superado, o tal vez no, seria muy feliz sin duda una mejor persona, les aseguro que no estaría escribiendo por no haberlo intentado, pero como no lo conocemos ni tampoco las consecuencias exactas de nuestras acciones todo se hace más difícil, no hable… Yo he cambiado ella también, tiene pareja y bajo el principio del respeto a ella como persona y de sus sentimientos, menos estaría pensando en hablar ahora, aunque sin duda se que obtendría el mismo resultado que calcule (golpe contra la pared jajajaja) de no ser así y tener éxito podría confundirla o causar en ella un sentimiento parecido al que tengo ahora, por lo cual seguirá mi silencio anónimo hasta que me decida a cambiarlo o realmente tenga el valor para hacerlo.

La verdad no se que duele más saber que nunca lo he intentado, o vivir sabiendo que lo intente (sin lograrlo) y soportar el rechazo, siendo sincero ya no se si esta mujer en realidad fue una o si este realmente soy yo...